Aunque ya se había demostrado la capacidad de medir distancias espectacularmente pequeñas mediante luz "comprimida", ahora es posible hacer esto incluso cuando el objetivo, la fase de un haz de luz, está en movimiento.
Un grupo de expertos de Australia y Japón ha hecho este descubrimiento en un experimento realizado en la Universidad de Tokio. Los científicos han logrado la medición más precisa del mundo de la fase de un haz de luz.
El equipo de Elanor Huntington, de la Universidad de Nueva Gales del Sur en Australia y del Centro de Computación Cuántica y Tecnología de la Comunicación, dependiente del Consejo Australiano de Investigación Científica, simuló las perturbaciones de fase que puede experimentar un haz de luz cuando viaja entre dos puntos, como por ejemplo en un cable de fibra óptica o entre dos satélites en el espacio.
Luego, los investigadores aplicaron su novedosa técnica de medición para determinar el margen de error, que fue más pequeño que lo alcanzable con fuentes de luz convencionales, como por ejemplo láseres.
La nueva capacidad de medición ultraprecisa demostrada en este proyecto tendrá importantes repercusiones para el campo de la medición, en variables como por ejemplo el tiempo, la masa y la distancia, y también será de utilidad para buscar la presencia de moléculas o materia subatómica, así como para la comunicación cuántica ultrasegura, y para detectar la existencia de las elusivas ondas gravitacionales.
En el trabajo de investigación y desarrollo también ha participado Howard Wiseman, del Centro de Dinámica Cuántica, dependiente de la Universidad Griffith, en Brisbane, Australia.
Referencia: UNSW, Sydney